Odio constructivo

el camino del amor, la sensibilidad y la autoayuda

8.1.05

 

Dos menos uno es mejor que uno

Odio ir a una fiesta, o reunión, o festejo, o similar, y ver que todos los concurrentes lo hacen con respectiva pareja adherida a una mano. Odio que sus charlas sean, consecuentemente, acerca de sus actividades de pareja y que cada asertación culmine con un "¿...no es cierto, (insértese apelativo melifluo)?". Odio estar presente en esas noches. Pero al otro día es sábado a la mañana, hay mucho fútbol para ver en la tele, a la vez que música para ser escuchada en alto volumen, y un libro pendiente, y ganas de tomar café y mate y jugo, todo al mismo tiempo, y el aire acondicionado simulando un clima sibérico..., y todo vuelve a la normalidad. El odio a veces puede ser pretérito, o cuando menos pasajero.

|

<< Home